RadioTonica

Si tienen tiempo...vean esto....

martes, 4 de marzo de 2008

NACION;ANTINACION;MUNDO



¿No les ha pasado que a veces hablan con mucha gente de diversos temas, que confluyen en uno solo?......Últimamente me ha pasado eso…hablando con amigos desde como está la vida en Europa del Este, hasta el poco apoyo del medio nacional chileno al metal, desde músicos chilenos que se quejan y otros que quieren hacer algo…. Desde la discriminación en Alemania, hasta la enorme cantidad de cesantes ilustrados que dependemos de trabajos temporales para poder pagar las cuentas en Chile. Si se dan cuenta todo confluye en el tema “Mundo-Nación-Antinación”.

Como me considero una “ciudadana del mundo”, hoy una utopía, si quieren, (aunque puede ser una verdad prematura como dice Lamartine, si lo piensan, ya que se tiende a ese horizonte), plantearé lo que siento y observo, con conocimiento de causa, sin duda, ya que lo único que me falta por conocer es el continente Africano (se reciben propuestas, jaja).

Antes que nada quiero dejar constancia de que: Soy Chilena porque nací aquí, y me gustan muchas cosas de éste país, además lo dice un papel, pretendo ir a vivir a Europa por razones que no tienen que ver en necesariamente con lo que aquí plasmaré, y que lo escrito corresponde a sentimientos y pensamientos al azahar, y a opiniones vertidas por las personas con quienes conversé.

Todo comenzó casi a la misma vez…hablando con una amiga que vive en Ámsterdam, mientras dejaba un comentario de apoyo a una banda nacional (Chile) (Anécdota que aparecerá un poco más adelante), y hablaba con un amigo Francés para negociar la difusión radial del metal Chileno.

Comenzaré por lo de siempre, por lo que me molesta… Me molesta mucho el constante desprecio de mucha gente hacia lo nacional. Sin ir más lejos, mientras almorzábamos hace un rato, un amigo me dice que si yo hubiese nacido en Europa hubiese sido una especie de Sartre o un Nietzsche. A lo que yo respondí que me sentía agradecida, pero que en realidad no tenía nada que ver, no lo fue porque no filosofaba de la misma manera en que lo hacían ellos, y que por ejemplo Borges fue argentino y trascendió las fronteras del país. La cosa quedó ahí, es algo anecdótico, pero eso, sumado a lo que recientemente me ha tocado escuchar de mucha gente, desató una serie de reflexiones en mi cabeza.

Me pregunto ¿Por qué existe ese constante rechazo a lo propio? Bien sabido es que somos un país del tercer mundo, que en Europa por ejemplo se vive mejor (en algunos sentidos), como algunos amigos me cuentan, que acá la clase política está y estará siempre vista con malos ojos, que no se respaldan ni valoran a los profesionales, que hay muchas injusticias y desigualdades. Pero eso no justifica ese sentimiento tan arraigado que postula que lo de afuera siempre es mejor. Afuera es más seguro, afuera la educación es mejor, afuera se trabaja mejor, afuera eres más feliz.

Afirmaciones que en cierta medida no están erradas, pero por lo general se sobredimensiona la cuestión elevando la vida en el exterior como el paraíso de la justicia y la igualdad (hasta que explota un tren en Atocha, claro está). Sin ir más lejos, algunas de las afirmaciones que leí incluían: "que genial, en Europa no tiran un papel en el piso" o "nadie pasa los semáforos en rojo" o lo que sea, y se le atribuye la culpa a que allá las leyes son más estrictas. Entonces se desprende que como acá las leyes no son tan estrictas, no debemos respetarlas, ¿cómo es la cosa?.

El cambio tiene que ser nuestro, no de las leyes. Dejemos de tirar papeles, dejemos de cruzar los semáforos en rojo, dejemos de hacer tantas otras cosas, las típicas avivadas, y las cosas pueden ser distintas. El cambio está en nuestras manos, después de todo, los políticos que no le dan bola a los talentos nacionales (por el poco apoyo a las bandas) son también personas, que comparten nuestra cultura y nuestras costumbres. Y en definitiva si no se cambia la actitud, cualquiera que llegase al poder haría lo mismo, porque al parecer, es parte de la sangre despreciar lo nacional. Y así estamos, mientras, mi amiga Patricia que vive en Suecia, me da su opinión: “Coincido con que no es bueno endiosar un país, y, en lo que a mi respecta, para algunos, a veces, es mejor estar bien a medias pero en tu propio país, que de prestado en uno que probablemente te vea como parte suya, me refiero a los hijos suecos de inmigrantes siguen siendo inmigrantes para Suecia, toda la vida". En todo el mundo se cuecen habas….

Lo anterior me llevó a pensar en el tan manoseado término coloquial nacional “Chaqueteo”: Famoso término que proviene de una anécdota ocurrida en el sur de Chile, en una competencia entre colonos y Chilenos. El equipo de colonos se reúne y comienza a analizar la mejor estrategia para subir a un palo y entre todos ellos eligen al más fuerte y alto para alcanzar la meta, obviamente que mientras intentaba subir, el resto del equipo alienta y ayuda con empujones para que logre alcanzar cuanto antes el logro, y derrotar al equipo Chileno. Por su parte nuestro team nacional, lo primero que hace es correr de manera alocada al palo y tratar de subir entre todos al mismo tiempo, y un hecho curioso, al que iba mejor encaminado para ganar (y con mayor ventaja que el colono), otro compatriota lo toma de “SU CHAQUETA” para bajarlo y este cae al piso.

Es un término utilizado para referirse al acto que realizan las personas para opacar el logro de otros, con el fin de que no siga destacando o avanzando. “Y este que se cree?, “piojo resucitado”, “así cómo suben caen”, “quién lo vio y quién lo ve”, “se cree el hoyo del queque”, “en algo turbio ha de andar”, “se le dio fácil, así hasta quién”, “pero, igual se le nota el origen.”, son algunas de las expresiones comunes que evidencian la mala leche de ALGUNOS …RECALCO Y REPITO…ALGUNOS Chilenos, entre los que no me incluyo, que frente a cualquiera que se distinga o salga del montón, que se anima a hacer cosas distintas y que logra un determinado grado de felicidad. Recuerdo la teoría de David Prater, productor musical que trabajó con la banda Chilena Fahrenheit, sobre los cangrejos: “¿Has visto alguna vez un cubo con cangrejos? ¿Cuando los atrapan en el mar y terminan en una caja? ¿Y cuando están desesperados, uno empieza a salir con sus tenazas pero el resto lo tapa y lo empuja de vuelta? ¡Chile es como un cubo de cangrejos! Que nadie se supere, que todos continúen siendo tan miserables como los demás. ¿Cómo le dicen? ¿Chaqueteo? Supe incluso que es el deporte nacional...”.

Otro ejemplo es lo que yo llamo, con todo respeto “el síndrome de la vieja”: “Ta mala la cosa", "Los políticos son puros delincuentes", "¿Donde vamos a llegar?", "La juventud ya no es como antes","Son todos corruptos", "¿Pa’ que?, si todos se arreglan los bigotes". Esas frases son síntoma del "síndrome de la vieja", cuadro que afecta no solo, como el nombre lo dice, a las viejas sino que a una infinidad de personajes anónimos, o no tanto que pululan por la república, (reconozcamos que a veces tenemos síntomas de aquello , más de alguna vez).

Este personajillo suele aparecer en las encuestas de matinales de la TV, despotricando contra "las autoridades" que no se aparecen por el barrio para que estas "se pongan una mano en el corazón" y les regalen o les arreglen los problemas. Este personaje, cuando más pudiente, llama para dar su opinión en foros televisivos como el Termómetro para siempre decir NO, todo mal, y luego escuchamos todos su último alarido cuando pasan los 20 segundos, o cuando el periodista lo corta amablemente con un "GRacias!". Este personaje se ve ahora más desamparado por la ausencia de programas de servicio en la parrilla programática de la TV, (muchos si sirvieron de real ayuda ala comunidad), pero siempre existirá una tribuna donde lo veremos actuar. Es la clásica señora que ante una oferta en una casa comercial, no duda en dar un codazo a la otra señora que le quiere ganar los zapatos 2x1 en las rebajas, o que en un estado de mayor desarrollo cívico, hace protestas y anuncia que llegará "hasta las últimas consecuencias" (en esta frase cito a FernandoVillegas), pero solo se queda en el anuncio.

Lamentablemente el facilismo evidente de “la señora”, hace que la negación sea lo que tenga en la punta de la lengua en cada conversación, victimizándose y mostrándose atacada por la sociedad, cuando a veces hay que parar de hacer eso y HACERSE CARGO!!!. Por una parte creo que atribuir al “ser Chileno” adjetivos como nación, solo produce profecías autocumplidas y provee de excusas a quienes realmente son así. De ahí sale la famosa frase: “Es lo que hay”. Por extensión, el atribuir adjetivos a cualquier nacionalidad o grupo, produce el racismo, la xenofobia e incluso el servilismo.

Así, nacen comportamientos tan curiosos y errados para mí, como tratar con simpatía a los orientales, con desdén a los peruanos y bolivianos, con curiosidad a los rusos. Y con un servilismo que raya en lo patético a los Norteamericanos y Europeos. Servilismo Europeizante, lo llamó el antipoeta Nicanor Parra, ese “servilismo orientado por el interés por diversos fines”, lleva a algunos a mirar en menos, u olvidarse de lo nacional en cierta forma. He aquí la anécdota mencionada al comienzo…mi comentario hacia la banda nacional fue EXACTAMENTE EL MISMO, incluso ofreciendo apoyo real, pero en el país, (con posibilidades de difusión extranjera, eso si,) que otro comentario hacia la misma banda, pero realizado por una persona de la UE. (Unión Europea, para los que se pierdan). ¿Que hace la banda en cuestión?, su interés no va por una Chilena sin tanto recurso ni contactos, sino por lo extranjero, entonces, ¿que pasa?, solamente las gracias o la respuesta va por ese lado, ¿y uno? muy bien, gracias, y después ellos mismos se quejan con uno de que no hay apoyo, ya me entienden. No voy tocar en esta ocasión, sí en una próxima, el tema de la música, las bandas, etc, porque aunque tiene que ver con el tema, eso da para un tema aparte de por sí.

O cuando alguna vez vinieron mis amigos de Barcelona a mi casa de Santiago, me deleitaba irónicamente, mirando como la tropa de gente se desvivía por atenderlos, por complacerlos, por hacerles cosas, por adularlos, hasta el punto de que llegaban a incomodar , sin saberlo, a los desconcertados visitantes…..

Es que es muy fuerte vivir en Chile con esa forma de pensar tan absurda, le abren las puertas de par en par algún extranjero, sin saber de donde vino, y si venía arrancando de su país perseguido por la INTERPOL, porviolador de menores, solo por el solo hecho de ser rubito, o rubita, cuando tienes que mostrar que vales, que sirves, que eres una buena persona, para que alguien te abra sus puertas.

Creo, con respeto, que la estupidez, la flojera, la imbecilidad, o bien, la virtud, la responsabilidad, la agudeza y la inteligencia, existen en gente de todos colores y nacionalidades. Los pueblos que asumen que sus clichés no son un determinante, son los que pueden progresar en sus estados de ánimo y comenzar a pensar en el desarrollo económico, mental y espiritual. Aquí, la opinión de mi amigo bajista, Pancho: “Siento que el: “somos flojos, somos incultos, etc, forman parte de una cultura que se NIEGA A SI MISMA… que se cierra posibilidades ante la sola idea de descubrirnos. “somos tan felices” con un numero uno, con ganar un campeonato mundial, con una miss universo, con un premio de literatura… en fin, con ganar posicionamiento internacional, porque siento que de esa manera, en una persona delegamos la responsabilidad de ser “destacados”, falta trabajo en equipo, en formarnos en una sola idea… y MOTIVADORES!!!! Y trabajar por esa razón, por ejemplo, si proponemos profesionalizar más las bandas de rock, sumando a las mismas bandas en una iniciativa en conjunto, con presentaciones, etc, a ver cuantos se suman. El señor dinero, que mi banda no se junta con las demás, que yo soy mejor, etc….Y ahí viene el conformismo, las quejas y el “suele pasar”.

En este punto me detuve a pensar en todo lo que he vivido en éste país y lo que me ha tocado vivir cuando he estado en otros, ya sea viviendo, trabajando, o solamente de turista…y viene el tema de la Discriminación. Miro a Chile, y veo mucha discriminación. Se discrimina a los peruanos, se les mira en menos por no estar tan mezclados con los europeos, por seguir conservando (y a mucha honra, cómo tiene que ser) sangre y rasgos indígenas. Lo mismo pasa con los bolivianos.En ambos países, dicho sea de paso, se tiende a odiar al Chileno también, por razones históricas (Guerra del Pacífico) o por encontrarnos arrogantes.

Pero en Chile no sólo se discrimina por estos tan "trascendentales" motivos a gente de países vecinos, sino que además se discrimina entre los mismos Chilenos. Miran en menos al que tiene apellido Mapuche, o rasgos indígenas, o al que no sabe leer bien, al que no terminó el colegio, o al que tiene algún defecto o problema físico. Y por supuesto, discriminan positivamente al europeo, norteamericano y chileno rubio pudiente, los miran diferente, los tratan diferente. Eso también depende, yo me he sentido discriminada ya sea, por un lado haber vivido en un sector pudiente de la capital, y por el otro, por tener un apellido, de gente “comunista”, porque soy pequeña, porque engordé, porque ahora estoy muy flaca, porque mi acento es extraño, porque no me visto con minifaldas, etc. Por uno u otro lado, se siente. Paula, mi amiga Chilena en Ámsterdam, a su vez me dice: “Y no relacionamos nuestro comportamiento, con la "discriminación" que tenemos acá en Europa y que afecta a los latinos. Pero es lo mismo”.

Y Paula continúa “Yo lo he notado menos en mi vida porque tengo apellido "raro", y aunque sea ridículo esas cosas impresionan en mi país. Ahora mismo tengo un pariente en la UCI de un hospital público en Chile, y dicen mis papás que notan que el personal los trata a ellos diferente, les sonríen más, son más considerados con ellos”. Discriminación, se le mire por dónde se le mire. Hospital Público….Y eso que no me he metido ni me voy a meter en política, aún, porque de ahí podríamos sacar muchísimo material de discusión.

Paula me dice: “imagínate a nosotros que vivimos en el extranjero, sufrimos una doble discriminación: primero porque aunque vivamos años aquí siempre seremos extranjeros. Segundo, porque cuando estamos en Chile nos miran como si viviéramos en lo top de lo top sin ver la realidad cotidiana que es lejos tan aperrada o sacrificada como la de ellos, y solos y sin apoyo y más encima dicen: “pero que reclamas si vives en Europa galla!!!! yo... me río no mas.”

Aquí marginan a los descendientes de indígenas, y se olvidan que son los dueños históricos de esta tierra. Creen que los Astaburuaga y los Edwards son más Chilenos que un Huenchumilla. Eligen a Miss Chile (alta, flaca, preciosa, de apellido rimbombante, pero mas tonta que una puerta) y la llaman "representante de la belleza de la mujer chilena", y yo sólo puedo pensar en la señora que se mata vendiendo pescado en la feria, que usa un delantal agujereado y le faltan varios dientes. Me hablan de que llegó a Chile tal o cual cadena de ropa, restoranes o cines... y me pregunto ¿a qué Chile llegó eso? ¿Porque al Chile dónde los niños no tienen zapatos no llegó nada de eso?.

Un amigo Alemán, Ian, me decía el otro día, que se notaba que Chile era un país que estaba muy bien, que él había estado en la nieve, que todo era de lujo."Claro", le dije yo, "pero ese Chile lo conocen pocos en mi país, no es el Chile más real".

Y es que a mí me pone de mal humor que hablen de la estabilidad de Chile, que digan que el país está muy bien, que tenemos una economía envidiable, cuando nuestro sueldo "mínimo" (e indigno), si es que tienes la suerte de tener trabajo estable, es de unos 200 euros, y con eso alimentar una familia de 5, hay gente vive en departamentos de dimensiones ínfimas, hacinada, duermen 5 por cama, apenas tienen plata para el pan, y tienen que hacer esperas eternas para que los atiendan en los hospitales públicos, gente que no puede estudiar ya sea en el colegio o en la universidad porque no tiene los medios suficientes, niños que caen en la delincuencia porque es un circulo vicioso, en donde las oportunidades se les hacen nulas, y ¡¡¡gente con una tremenda capacidad, estudios, ganas, esfuerzo, que tiene que conformarse con disfrazarse de Winnie the poo para ganar algo de dinero para pagar las cuentas, porque no encuentra un trabajo ya sea porque está sobrevalorada para el puesto, o simplemente está todo ocupado porque lo tiene el primo del dueño!!!. (Lo último lo expresé con rabia porque ahí me incluyo yo, jeje).

Y entonces me pregunto ¿de qué hablamos cuando hablamos de Chile? ¿Y de qué hablamos cuando hablamos de "los Chilenos"? ¿Quién es Chileno realmente? ¿Cuántos Chiles hay en Chile, digo yo? ¿Y cuál es el más real?.

He tenido la suerte de vivir las dos caras de la moneda, he conocido muchos países, grandes ciudades del mundo, he vivido muchas malas y buenas experiencias en cada una de ellas, sé muy bien de lo que hablo, soy ciudadana del mundo, he visto y conocido muchos mundos, nada como Chile, por lo bueno y por lo malo, pero todos los países tienen sus cosas buenas, dignas de imitación o adaptación, y también sus males, sus cánceres que necesitan extirpar.